En que sin tocar a otra persona podemos ayudarla. Y podemos armonizar para que las circunstancias nos sean propicias (si es que así tiene que ser).
Podemos aprender a armonizar todo lo que tiene vida: animales, plantas e incluso circunstancias. Por ejemplo, si alguien se tiene que operar: podemos armonizar para que la persona esté fuerte para la recuperación. Podemos armonizar al cirujano al equipo médico para que estén precisos, claro y exactos en su actuación.
En la información que podemos registrar para armonizar, por ejemplo que un conflicto viene desde el embarazo o desde un ancestro.
En la conexión con otras personas, por ejemplo con los hijos, cuando los ayudamos, nuestro consciente nos conecta con la satisfacción del protector y los hijos perciben desde el inconsciente esa conexión.
En que empezamos a vivir un nuevo Paradigma, podríamos llamarlo la acción de la consciencia.